¡Hola amiguis!
¿Qué tal?, lo primero ¡Feliz año!, ya terminadas las fiestas y yo con mi post navideño. Este año la navidad ha sido en la playa, pero esta vez por poco tiempo.
La playa en invierno es una pasada cuando hace bueno, el solecito, la luz, el oleaje... ¡todo! no sabría como describirla, para ello mejor os enseño fotos.
Pero no todo es idílico y precioso, como haya temporal os aseguro que es un truño, si llueve, tengo que estar pendiente que no se me inunde la casa, en Isla Canela el mantenimiento del alcantarillado es muy nefasto, la mayoría de las alcantarillas están sin limpiar y se atascan con cuatro gotas, y, si ademas le sumo que mi casa es de las más antiguas equivale a inundación segura.
El frío y la humedad que se genera es horrible, las casas no están preparadas para el frio, en mi caso, tengo una estufa de queroseno y un radiador encendido prácticamente todo el día, al final genero un microclima maravilloso.
Pese a todo esto, pasar unos días allí merece la pena, simplemente salir de la cama y tener a 100 metros la playa, da la vida, aunque haya temporal, se respira aire puro, si no sale el sol, simplemente la luz que hay te activa el cuerpo y pasear por el paseo marítimo, aunque sea con paraguas, reconforta.
Conclusión amiguis, la playa es vida, debería estar recetada
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